A falta de nuevos proyectos y considerando la coyuntura sociopolítica actual, ¿cómo puede una empresa como Ausenco continuar creciendo?

El 2022 fue un año especialmente positivo para Ausenco en Perú donde presentamos bastante crecimiento a pesar de la coyuntura. Fue un periodo de culminación de algunos proyectos que teníamos en cartera, como el caso del tercer molino de bolas para Las Bambas. Otro proyecto digno de destacar que iniciamos en el 2022 y continuaremos los próximos años es San Gabriel de Buenaventura, donde tenemos el rol de EPCM. Actualmente nos encontramos en la fase de inicio de las obras tempranas y de finalización de la ingeniería de detalle.

De igual manera, es importante mencionar la oportunidad de crecimiento en los proyectos actuales. Hemos notado mucho interés en lo que concierne a la extensión de vida para operaciones actuales, especialmente en distintas mineras en continuar avanzando con los estudios, una fase agitada desde el punto de vista social. Por otra parte, el año pasado apoyamos al proyecto Zafranal (Teck) en el proceso de obtención del permiso medioambiental y, en el proyecto Quellaveco (Anglo American), actuamos como asesor principal de su comisionamiento. 

¿Qué consejo les daría a las empresas mineras para abordar el proceso de permisos?

Los permisos representan un proceso complejo y toda acción que tienda a expeditarlos será favorable para la industria, ya que estos se encuentran en la ruta crítica de muchas decisiones y definiciones de los proyectos. Lo que destacaría es tener el respaldo de especialistas locales que conozcan bien la legislación y trabajen integradamente con el equipo técnico porque las deficiencias en la estrategia de permisos pueden llegar a tener un impacto grande tanto en el proyecto en sí mismo como en los plazos.

Desde Ausenco, contamos con un equipo de especialistas en medioambiente en Lima que trabaja integradamente con el equipo de ingeniería. Concebimos los proyectos de forma holística para influir positivamente en las empresas mineras y las comunidades, mitigando al mismo tiempo el impacto medioambiental. Nuestros especialistas en permisos aportan gran conocimiento técnico y experiencia, fundamentales para interpretar y comprender las consecuencias de los cambios normativos y así promover el desarrollo exitoso de los proyectos.

¿Qué enfoque tiene Ausenco con respecto a los factores ESG?

Abordamos los factores ESG desde distintos ámbitos. Uno de ellos es el social, y participamos en el involucramiento de la comunidad local para ayudar a gestionar el impacto del proyecto y maximizar los beneficios desde el principio. También examinamos otros aspectos medioambientales como la descarbonización, sobre todo desde el punto de vista de insumos básicos como la energía y mediante otras medidas que no solo son aplicables a proyectos nuevos, sino también a proyectos existentes como es la electrificación de la flota de camiones y el uso de nuevas tecnologías que permiten disminuir el uso de los recursos hídricos y de energía.

En Ausenco ofrecemos métricas que nos permiten evaluar el progreso y que de hecho sí ofrecen mejoras en el desarrollo de los proyectos y su construcción. Esto, combinado con los impactos del cambio climático, resulta crucial. Así, contamos con especialistas que analizan los impactos a futuro y para algunas operaciones resulta ser un tema clave, especialmente en relación con los recursos hídricos y el impacto del desarrollo de sus infraestructuras.

¿Podría comentarnos acerca de algunas irrupciones tecnológicas que estén aprovechando?

La flotación de partículas gruesas ha despertado un gran interés por su capacidad de permitir tamaños de molienda más gruesos, reduciendo el consumo de agua y energía y la producción de relaves finos. También hay otras tecnologías como el uso de relaves filtrados o la clasificación de materiales a granel. Tenemos algunos proyectos a nivel conceptual en los que aplicamos estas tecnologías de forma rutinaria, y que se construirán en unos siete años.

La incorporación de nuevas tecnologías depende de cada operación: primero debe tener las características para beneficiarse del uso de estas tecnologías y, luego, hay ciertas restricciones para su implementación. La mejora de la eficiencia operacional es algo que todas las mineras quieren y, si hay suficiente vida restante en la mina, merece considerarse.

¿Cómo está afectando la conflictividad social la percepción de los inversores extranjeros?

La conflictividad social en Perú y el activismo antiminero es uno de los desafíos que representa el mayor reto para las empresas mineras. También es uno de los mayores riesgos en el desarrollo y operación de proyectos desde el punto de vista de los inversores. En retrospectiva, es algo que siempre ha existido, pero continúa siendo un problema pendiente de resolución que mejoraría mucho la seguridad de los inversores. Las cuestiones políticas tienen cierta influencia en la conflictividad social, que resulta ser el principal obstáculo para algunos de los grandes proyectos en la cartera del país y también la normalidad de las operaciones en las minas existentes.

Sin embargo, las tendencias globales y expectativas de demanda a largo plazo hacen ver el futuro de la minería en Perú con mayor optimismo en general. El crecimiento de la industria sigue representando un gran potencial de crecimiento y riqueza para el país. El interés continuo en exploraciones y desarrollo de nuevos proyectos es consistente con esta visión más optimista de potenciales inversores en mayores proyectos a largo plazo.

¿Qué factores moldearán el futuro de la minería peruana?

En la búsqueda global por una mayor descarbonización y la reducción de la dependencia en combustibles fósiles, el futuro de la minería en Perú es muy auspicioso gracias a su rica geología, particularmente en metales como el cobre y el oro. La expectativa en torno a la electrificación del transporte de manera global en los próximos años marcará la gran tendencia de demanda del cobre, lo que favorecerá al mercado local. Para cristalizar esta oportunidad va a ser clave el continuar con el desarrollo y capacitación de las nuevas generaciones de profesionales en la industria que soporte su crecimiento, así como la promoción de una mucha mayor diversidad e inclusión lo que también mejorará el desempeño e imagen de la industria minera en el país.